Soneto para Helena; Pierre Ronsard
Cuando seas anciana, de noche, junto a la vela
hilando y devanando, sentada junto al fuego, dirás maravillada, mientras cantas mis versos:
«Ronsard me celebraba, cuando yo era hermosa»,
y que medio dormida ya por la labor
se despierte al oír el sonido de mi nombre,
bendiciendo el tuyo con inmortal alabanza.
Yo estaré bajo tierra, y fantasma sin huesos
reposaré junto a la sombra de los mirtos,
y tú serás una anciana junto al hogar encogida.
Lamentando mi amor y tu desdén altivo
Vive, créeme, no aguardes a mañana:
Coge desde hoy las rosas de la vida.
2 comentarios:
:)
Gracias cielo. Tengo otro faro para ti de mi última aventura. Te lo haré llegar como el anterior.
Volvemos a las andadas. ajjajajaj
Besitos chiki.
:)
espero que todo vaya bien.
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